En ocasiones es fácil decir "Te grité porque me hiciste enojar", "Fue culpa de la situación", "Por mujeres como tú hay hombres como yo" ¿?... en estas ocasiones ¿te has puesto a pensar en el enorme poder que le estás dando a los otros sobre tu forma de sentir o actuar?
Si tomamos literalmente la idea de que esta persona ME HIZO enojar quiere decir que ESA persona tiene el (enorme) poder de generar en mí una emoción lo suficientemente poderosa para hacerme a mí gritar sin importar las consecuencias que esto pueda tener PARA MÍ.
Cuando nos enojamos esto es lo que pasa:
La imagen tiene muchos significados, el estado de alerta continuo en el que nos pone el enojo nos desgasta no sólamente de manera exterior sino también interiormente (he ahí el por qué de que sea un viejito, no quiere decir que los viejitos son todos cascarrabias, quiere decir que te envejece prematuramente), el corazón necesita bombear sangre más intensamente, sentimos una especie de "cosquilleo" en los músculos de las piernas y los brazos e internamente suspendes las labores del estómago en la digestión (¿has sentido dolor de estómago después de enojarte...), tal vez sientas como se acelera tu corazón (taquicardia), el estrés del momento nos genera además de una mala digestión, retención de grasas...¡Todo esto porque tu cuerpo se está preparando para atacar y requiere más energía de la que normalmente ocupa!
En el hombre pre-histórico resulta que este sistema era realmente funcional para sobrevivir, la cantidad de enojo lo preparaba para atacar y defenderse o defender a su familia, sin embargo hoy en día piensa en toda TODA realmente TODA la energía que inviertes en enojarte con esa persona que se te metió en el periférico, o ese conductor de pecero que "le vale", en esa señorita del banco que te atendió mal, en....
¿Te das cuenta de lo fácil que es enojarte? ahora dime cuánto tiempo requiere que te "des-enojes" probablemente sea más... obsérvate la siguiente vez que te enojes con alguien cuánto tiempo pasa hasta que olvidas (sinceramente) lo que pasó...
Puede ser que te des cuenta ya de la inversión en enojo que estás haciendo. Ahora ¿qué hacemos?
En la terapia racional emotiva lo primero que tenemos que reconocer es
¿De quién es la emoción? ¿el enojo es mío o es de alguien más?
Y si es mía ¿puede ser que yo tenga control de ella?
Una persona no nace enojada, el enojo lo vamos construyendo y moldeando a partir de los pensamientos que tengo acerca de ello, tal vez en mi casa me han enseñado que me DEBO enojar si alguien quiere pasarse de listo conmigo, o yo he aprendido que gritando los demás me escuchan o hacen lo que yo quiero que hagan (ese es un gran tema aparte que no tocaré en este momento pero sí en el futuro)... ¿qué beneficios te trae a ti el enojo? ¿puede ser que por esto que estás obteniendo sigas actuando de manera enojosa?
Y finalmente ¿valió la pena? ¿obtuviste lo que quería? si sí... dime a costa de quién, es en serio, el enojo desgasta, te recorta vida y momentos de alegría. La terapia propone cambio (y aprovecho para decirte que si no los notas o no los reconoces o hay algo que anda mal en el proceso) y ya que "algo" debe cambiar y TÚ tienes control de ti qué te parece si la próxima vez que detectas que estás enojándote te detienes, usa una señal de ALTO imaginaria, ¡no vayas hacia allá! un nivel de molestia que puedas controlar te ayuda a no actuar sin pensar, no significa que no te enojes jamás, quiere decir que en vez de llegar a un grado 10 en el que gritas, hieres verbalmente o lloras o te quedas callado con el estómago hecho nudo, llegas a un nivel 3 ó 4 que te permite decir "estoy muy molesto por esto y esto". Te permite alejarte "elegantemente" antes de ceder a la provocación y decir "en este momento estoy tan molesta que no quisiera hablar contigo" y proponer "hablemos mañana" "dame unos minutos", etc.
¿Por qué no lo intentas? mantenerte tranquila(o) te hace sentir confianza acerca de ti mismo ¿te suena el haberte dicho a ti mismo "es que cuando me enojo digo cosas que no quería decir" "me siento fuera de control" "me da mucha pena acordarme del show que di cuando le gritaba a mi mamá"?
Tú tienes mayor posibilidad de controlar tu enojo, de tener una mejor vida, de disfrutar mayor cantidad de momentos de alegría y de no provocarte atoreproches, conoce tu forma de enojarte, ACEPTATE y trata de ensayar alternativas a esos momentos en los que no te gustes porque la realidad es que puedes cambiar si tú lo quieres y estás dispuesto(a) a practicar esta nueva alternativa, recuerda que el cambio no se logra con una vez que lo hagamos sino con tanta práctica que ya me hace actuarlo de manera natural.
Si necesitas mayor orientación contáctame, con mucho gusto puedo ayudarte a practicar un enojo que te acerque a tus objetivos y a una mejor calidad de vida.
¡Hasta el próximo miércoles!
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